Talleres fue goleado 3 – 0 por Los Andes, en el Estadio Eduardo Gallardón, en un clásico barrial, en el que tenía que tratar de ganar. Tempranamente, Gustavo Turraca clavó la pelota en el ángulo y convirtió un golazo, a los cinco minutos del primer tiempo y a partir de allí, los de Lomas se adueñaron del manejo estratégico del duelo. Además, sobre el cierre de la primera parte, Enzo López gritó el segundo gol para el Mil Rayitas, y desmoronó por completo el papel de Talleres en la cancha. En el segundo tiempo, cuando Los Andes cedió terreno y Talleres tenía un poco más la pelota, el equipo de Escalada no supo ser punzante ni generar situaciones para descontar. A doce minutos del final, Gonzalo Salega anotó otro golazo, de tiro libre, para darle brillo al resultado conseguido por el elenco de Sebastián Salomón, que fue muy pragmático. Talleres tuvo poca claridad, no logró mostrar intensidad y alternativas en su expresión de juego, para arrinconar al rival y remontar el resultado. No obstante, Eduardo Gutiérrez tampoco advirtió dos garrones en el área de los defensores locales a los atacantes del Tallarín, que podrían haber sido sancionados con penales, aunque ello no justifica la pobre producción de la visita. Con esta derrota, la tercera en cinco presentaciones como visitante, quedó séptimo en la tabla, a cinco unidades del puntero Justo José de Urquiza -quien aún debe jugar en esta 10º fecha-, cuando le quedan veintiún puntos por jugar en el Torneo, se complicó demasiado para poder dar pelea por el Apertura. El resultado, duele e irrita en Escalada.
Foto Mono Gómez. Talleres, con impotencia y arrarón en el área, buscaba el descuento.
¡De las derrotas que más duelen! Son partidos, en lo que se juega más allá de lo deportivo, por el orgullo y la identidad de la ciudad a la que se representa. Talleres recibió un duro en golpe, en su visita al Estadio Eduardo Gallardón, en Lomas de Zamora. Los Andes goleó 3 – 0 al Tallarín, en el duelo de barrios, entre Lomas y Escalada, y lo dejó en una situación muy complicada de cara a lo que se viene, en el último tramo del Torneo Apertura.
Lejos de sacar a relucir chapa de candidato, el Tallarín se mostró tibio. Muy endeble; falto de rebeldía y previsible en sus recursos estratégicos, para intentar revertir un marcador que fue adverso, desde el inicio.
En la enorme soledad que proponía un escenario sin público, falto del aliento bilateral que en otras épocas, ambas parcialidades le hubiesen dado, se estaban acomodando los dos equipos en la cancha, midiéndose desde lo táctico, cuando el local pegó el primer golpe.
Cinco minutos marcaba el cronómetro apenas, en el momento que Los Andes enarboló con Delfor Minervino y Gonzalo Salega, su primer ataque profundo por la derecha. Éste, en caída, metió un centro que Facundo Quintana, no pudo rematar de lleno al arco. Pero tras un rebote, en Iván Becker, Delfor Minervino tomó la pelota y metió un pase atrás. Parado y de lleno, le dio a la pelota el mediocampista central Gustavo Turraca, que clavó la pelota en el ángulo superior izquierdo del arco de Ezequiel Cacace. Un verdadero golazo, para empezar a encontrar la victoria. Talleres perdía 1 – 0 y ese gol, lo condicionó el resto de la tarde.
El libreto que traía de origen el equipo de Rodolfo Della Picca, se alteró a partir de ese gol tempranero del rival. Pese a que luego de tamaño impacto, Talleres trató de asentarse en el campo y buscar alguna vía para llegar hasta el arco de Leandro Brey, tardó casi quince minutos en poder fabricar alguna chance concreta.
De todos modos, Los Andes administrando la ventaja a su favor desde muy temprano. Esa, fue su gran ventaja. Escogió meterse dentro de su propio campo, por momentos, y manejó con cautela la reposición de cada pelota, y los pases en su campo. En ese tramo, le cedió el manejo del balón al rival, descansando en su solidez defensiva.
En un partido que era aburrido y muy lento, recién a los dieciocho minutos, Talleres asomó con fuerza por el arco visitante, luego de un pase filtrado de Fernando Enrique por derecha, un centro de Luis Monge al cuadro menor, con Dylan Vergara no llegó a cabecear y la pelota que siguió de largo en su recorrido.
A los veinte minutos, Fernando Enrique envió un centro cruzado desde la derecha, para Gabriel Arce, quien se sacó de encima la marca de Delfo Minervino y generó un remate débil, que terminó en las manos de Leandro Brey.
Cerca de la media hora de juego, Talleres tenía más el balón en la mitad de la cancha, pero no lograba ser profundo. En ese tramo, a los treinta y un minutos exactos, Gabriel Arce ejecutó un tiro libre desde la derecha, con su pierna zurda, que rebotó en la barrera y luego picó cerca del palo izquierdo del arquero. Terminó en un tiro de esquina. Esa, fue la más clara del Tallarín, en la primera parte.
Cuando daba toda la impresión que lo mejor que le podía suceder a Talleres, era que termine la primera parte, para reconfigurar su estrategia de cara a la segunda mitad, ya que el local mostraba desacoples en su salida y la visita no los podía aprovechar, Los Andes dio otro golpe letal. Se jugaba cuarenta y cuatro minutos pasados, cuando Ulises Ortegoza metió en la mitad de la cancha, a espaldas de Nicolás Malvacio, un pase profundo para Gonzalo Selega. El mediocampista por derecha del Mil Rayitas, que fue la gran figura, se proyectó por esa banda y metió un centro magnífico para Enzo López, quien puso en práctica de la “ley del ex”. Amortiguó lo pelota con el pecho, vulneró la marca de Nicolás Sainz, y convirtió el segundo gol frente a Ezequiel Cacace. Los de Lomas, estiraban la ventaja, para un resultado que era exagerado, pero el justo premio a su practicidad.
El complemento, propuso un difícil desafió para los de Rodolfo Della Picca, que debía mostrar mayor vocación ofensiva y profundidad, si pretendían remontar la historia. Y pese a algunos intentos, Talleres no logró comprometer la victoria que buscaba asegurar ya a esa altura Los Andes, con su orden habitual.
Con Jorge Márquez en cancha, por Gabriel Arce, el equipo buscaba tener más explosión en ataque, pero pocas veces logró romper con la solidez defensiva del local.
A todo esto, a los cuatro minutos, Gonzalo Selega volvió a proyectarse por la derecha, y metió un centro complicadísimo que no Agustín Battipiedi, no alcanzó a conectar de lleno. Se perdió el tercero.
Los de Escalada, encontraron una chance para descontar, a los ocho minutos. Dylan Vergara, trabajando en esa maniobra su mejor perfil, como delantero, penetró por el área grande, llegó hasta el fondo y envió un primer centro, que rechazó Gustavo Turruca. Y en el rebote, el mismo Dylan Vergara sacó la pelota hacia la puerta del área, para que Fabián Monserrat rematara al arco. La pelota, se fue desviada.
El partido, con el correr de los minutos, iba perdiendo brillo en su forma de juego. No daba la impresión que Talleres pudiese remontarlo. Más allá de algunas jugadas armadas en la mitad de la cancha, con los ingresos de Matías Sosa e Igancio Ruano, y el soporte de Fernando Enrique, faltaba profundidad y vértigo. El Mil Rayitas, mantenía su esquema, su velocidad para contragolpear, y trabajaba para quedarse con el triunfo.
Si bien el árbitro Eduardo Gutiérrez, con sus decisiones, no fue determinante para la resolución del partido, omitió dos agarrones claros en el área de Los Andes, que los defensores locales efectuaron con la pelota en movimiento a los atacantes Tallarines. De haber sido advertidos por el Juez, tal vez hubiese permitido a Talleres, la chance de descontar.
A los veinticinco, Los Andes volvió a tener otra chance nítida, para convertir. Enzo López metió un pase hondo, que Gonzalo Salega recibió a espaldas de Nicolás Sainz. Y tras sacarse la marca de Cristian Godoy, desperdició con un remate por encima de la valla.
Pero el resultado se selló definitivamente, allá por los treinta y tres minutos de ese segundo tiempo, cuando Gonzalo Salega recibió una falta de Jorge Márquez y encontró su mayor premio. Los Andes tuvo un tiro libre a favor. Gonzalo Salega se hizo dueño del mismo e incrustó la pelota contra el palo izquierdo de Ezequiel Cacace. El partido estaba 3 – 0, y no había mucho más para agregar.
La visita fue pura impotencia de allí hasta el final. El resultado era demasiado abultado, para lo que fue el trámite del partido. Pese a ello, Juan Miritello bajó con el pecho la pelota en el área chica, tras un centro de Fernando Enirque, pero el remate impactó en el travesaño y se le negó la del descuento.
La goleada dejó una herida profunda en el sentir de la mayoría de los hinchas Albirrojos, dado que además de la derrota en el clásico entre los dos barrios, Talleres volvió a dar otro paso en falso. Dejó una pobre imagen, como presunto candidato a pelear entre los de arriba. Falló en un partido clave y no mostró una expresión de juego contundente, pese a su experiencia. Perdió ante un rival muy sólido, pragmático, que sabe lo que quiere dentro de la cancha, con muchos jugadores jóvenes que lo metieron como escolta del líder. Con un escaso porcentaje de puntos cosechados como visitante, y con tres derrotas en cinco partidos jugados fuera del Pablo Comelli, es evidente que a este ritmo no podrá llegar con chances de alcanzar lo más alto, en el tramo decisivo del Apertura. Reprobó el examen y desperdició una gran chance, este Sábado en Lomas.
SINTESIS:
LOS ANDES 3
Leandro Brey; Leandro Lugarzo, Christian Cepeda y Matías Vera (82’ Gabriel Pereyra); Delfor Minervino, Gustavo Turraca (80’ Gustavo Mbombaj) y Agustín Battipiedi (69’ Matías González); Gonzalo Salega (82’ Luis Pérez), Ulises Ortegoza y Facundo Quintana; y Enzo López (80’ Rodrigo Trejo).
Suplentes: Federico Díaz y Oriel Maldonado.
DT: Sebastián Salomón.
TALLERES 0
Ezequiel Cacace; Luis Monge (60’ Matías Sosa), Cristian Godoy, Nicolás Sainz y Nicolás Malvacio (62’ Ignacio Ruano); Iván Becker; Dylan Vergara (69’ Martín Giménez), Fernando Enrique, Fabián Monserrat y Gabriel Arce (45’ Jorge Márquez); y Juan Miritello.
Suplentes: Lucas Zeiden, Martín Río y Lucas Barrientos.
DT: Rodolfo Della Picca.
Goles: 5’ Gustavo Turraca, 44’ Enzo López y 78’ Gonzalo Salega (LA).
Amonestados: Gustavo Turraca y Leandro Lugarzo (LA); Jorge Márquez y Fernando Enrique (T).
Estadio: Los Andes (Buena).
Árbitro: Eduardo Gutiérrez (Regular).
Asistentes: Gabriel Lombar y Martín Vaccaro.
Cuarto Árbitro: Lucas Di Bastiano.
Recaudación: A puertas cerradas.
Público: 100 personas aproximadamente.
Foto Mono Gómez. Otro agarrón en el área. De todos modos, Talleres careció de situaciones nítidas.
Foto Mono Gómez. Nicolás Sainz, se lamenta por el tiro libre de Gabriel Arce no entró.
