Talleres derrotó 3 – 2 a Comunicaciones, en el Estadio Pablo Comelli, en una remontada épica, jugando con diez hombres y se quedó con un triunfo dorado, frente al ganador del Torneo Apertura de la Primera B. Los de Agronomía, abrieron el marcador a los dieciséis minutos, con un gol de Emiliano Trovento, en una jugada en la que pareció existir una mano previa de Nahuel Cáceres; y estiró la cuenta, luego que Ariel Barreiro le cometió un penal a Jorge Ferrero, que le costó su expulsión y pese a que Mauro Casoli, contuvo el disparo de sentencia de Lucas Banegas, en el rebote, el marcador central convirtió el segundo tanto. Con una diferencia de dos goles abajo, y cincuenta y cuatro minutos por delante, el Albirrojo se recuperó con muchísima actitud. Primero, Franco Pulicastro convirtió el descuento, a los treinta y ocho; y antes del cierre de esa electrizante primera parte, Lucas Farías clavó desde afuera del área, en el ángulo, el empate. En el segundo tiempo, antes que el que Cartero pudiese hacer valer el jugador de más que tenía, nuevamente Franco Pulicastro señaló un gol, a los trece minutos, para el delirio de los de Escalada. No obstante, Comunicaciones buscó la igualdad en el tramo final, y en tres momentos distintos, entre Nicolás Malvacio, Mauro Casoli y el travesaño, resguardaron los tres puntos para los de Escalada. A todo esto, y en un duelo con altísima intensidad, el árbitro Gonzalo Pereira y el segundo asistente Bracho Gómez, cumplieron un papel escandaloso, con decisiones que favorecieron al conjunto de Germán Cavalieri, que incluyeron entre otras, permitiendo una mano de Gonzalo Vivas para obturar lo que pudo haber sido el cuarto gol del Tallarín, y un par de posiciones adelantadas que fueron sancionadas cuando los atacantes del local, estaban habilitados. El Albirrojo, sigue en la punta del Torneo Clausura y ahora lidera junto a Defensores Unidos, con ocho puntos.
Foto Mono Gómez. Un abrazo que sintetiza, la emotiva remontada con un jugador menos.
Una enorme victoria de Talleres. De esas, que son indispensables, ante un rival de fuste, que ya tiene su cartel asegurado, en la película de la definición de esta Temporada de la Primera B. Era importante, vencer a Comunicaciones, luego de lo que había sido la dolorosísima goleada, en el Apertura.
Sin embargo, resulta tener un valor agregado, el modo en el que el Tallarín obtuvo este triunfo. En un partido sufrido, reñido, en el que estuvo en desventaja desde muy temprano, por errores propios pero también con la intervención del árbitro Gonzalo Pereira, en su contra. Mostró personalidad y fiereza para dar vuelta el resultado. Jugando más de cincuenta y cuatro minutos con un futbolista menos en la cancha, el elenco de Escalada doblegó esfuerzos. Trabó y ganó con el corazón, en cada dividida, como no había ocurrido en otro pasaje del año. Y la recompensa a ese esfuerzo, valió la pena. Al cabo de la tarde, Talleres volvió a estar entre los líderes de la tabla de este Clausura.
El arranque del choque, no pasó demasiado. Algunas imprecisiones en la construcción del juego, permitían presagiar una jornada con pocas emociones. Pero todo eso cambió, luego de la primera decena de minutos.
A los catorce minutos, se observó la primera acción interesante, para el Albirrojo. Cerca de la medialuna del área, Luciano Arcuri abrió a la izquierda para Lucas Farías, quien controló y sacó un remate al primer palo. Julián Kadijevic, el joven arquero, apareció con buena atajada, para desviar la pelota al tiro de esquina.
El partido, comenzó a tomar vuelo. El reloj señalaba los dieciséis minutos, cuando llegó una de las más polémicas de la tarde. En un buen contragolpe del Cartero, controló de espalda Nahuel Cáceres y abrió a la derecha para Jorge Ferrero. El mediocampista diestro, avanzó por derecha hasta la puerta del área y tiró un centro, que llegó a rozar (con el brazo) Nahuel Cáceres, quien sirvió además como cortina para anular a Nicolás Monserrat. Con esa maniobra, dejó solo en el segundo palo a Emiliano Trovento, quien apenas tuvo que empujar la pelota y decretar el primer gol del partido. Insólitamente, el Árbitro Gonzalo Pereyra y el Juez de Línea Héctor Bracho Gómez, no vieron como el delantero visitante tocó la bocha con la mano, al ganarle al defensor Tallarín. Explotó todo el banco de Talleres. De todos modos, Comunicaciones se imponía 1 – 0 en el tanteador, ocasionándole daño por una de las bandas.
Talleres mostró una reacción rápida. A los dieciocho minutos, luego de un tiro de esquina desde la izquierda, le quedó la pelota a Fernando Enrique, quien levantó el centro al área y conectó con la cabeza de Franco Pulicastro. En esta definición, no pudo darle fuerza al remate. Controló sin problemas, Julián Kadijevic.
En veintidós minutos, desbordó por izquierda Lucas Farías y levantó un centro llovido, al segundo palo, que llegó a cabecear Fernando Enrique. El diez de Talleres, intentó jugar con Franco Pulicastro, pero el arquero Julián Kadijevic, se anticipó a la jugada y despejó con su puño.
El elenco conducido por Germán Cavalieri, se recostó unos metros más atrás, para esperar que aparezcan algunos espacios y filtraciones en el fondo del local. Con la intención de liquidarlo.
En ese contexto, a los treinta y cuatro minutos, se presentó el peor de los escenarios para el equipo de Norberto D’Angelo. Penal para Comunicaciones y expulsión de un hombre del Tallarín. Nahuel Cáceres, desde la mitad de cancha, jugó atrás para Emiliano Trovento, que cambió rápido de frente ante la subida de Jorge Ferrero. Comunicaciones, lo agarró mal parado a Talleres. Jorge Ferrero avanzó metros en profundidad hasta el área, y enganchó hacia adentro, ante la salida de Mauro Casoli. Cuando iba a rematar, Ariel Barreiro lo tocó desde atrás, cometiéndole penal. El árbitro, sancionó la falta con expulsión del juvenil Albirrojo, que se retiró con lágrimas en los ojos.
El encargado de la ejecución de la pena máxima, fue Lucas Banegas, a los treinta y seis minutos. El defensor, cruzó su remate al palo derecho de Mauro Casoli. Acertó el arquero, tapando el penal, con la mala fortuna que el rebote, cayó en los pies del mismísimo Lucas Banegas. Y el emblemático marcador central, se encargó de convertir el 0 – 2.
En los pronósticos, daba la impresión de estar todo sentenciado, en el Pablo Comelli. Talleres, caía por dos goles de diferencia ante Comunicaciones, el ganador del Apertura, y jugaba con un hombre menos. Sin embargo, por fortuna, no todo estaba dicho.
Apenas dos minutos pasaron, cuando a los treinta y ocho, fluyó otro tiro de esquina por el sector izquierdo, ejecutado por Fernando Enrique. La peinó Cristián Godoy en las alturas. La pelota, le quedó a Franco Pulicastro, que ensayó una pirueta y colocó el envió en el ángulo superior izquierdo. Nada que hacer para Julián Kadijevic, esta vez. Golazo para Talleres. Las cosas, estaban 1 – 2.
Los locales, pese a tener un jugador menos, fueron a toda velocidad, con el corazón a flor de piel, a buscar el empate. Inmediatamente, Patricio Romero y Fernando Enrique, combinaron por la izquierda. El experimentado mediocampista, envió un centro bombeado, que conectó Luciano Arcuri, por el segundo palo. A la hora de cerrar la maniobra, Luciano Arcuri eligió impulsar un centro atrás, que terminó rebotando en Mariano Pieres y despejó finalmente, Emiliano Trovento.
Apenas minutos más tarde, a los cuarenta y tres minutos, mientras en los dos bancos había incidentes e insultos, Fernando Enrique abrió para la izquierda con Patricio Romero, quien jugó rápido hacia adentro con Lucas Farías. El delantero y goleador de Escalada, controló en el vértice del área y sacó un gran remate al ángulo izquierdo de Julián Kadijevic. La bola, se incrustó en el vértice superior del arco, en una definición dorada. Otro precioso golazo de Lucas Farías, para poner el partido 2 – 2, al cierre del primer tiempo, en un duelo intenso y caliente.
Así, comenzó el segundo tiempo, con un Comu que había sido herido en su amor propio y estaba obligado a ir por los tres puntos.
La primera de esa etapa complementaria, fue para Talleres. A los once minutos, tiro libre ejecutado por Fernando Enrique. Y Franco Pulicastro, de volea, intentó colocar esa pelota al ángulo. Pero se desvío en su recorrido; se perdió apenas cerca del segundo palo del arquero.
La actitud del equipo dueño de casa, a la hora de jugar el balón, disimulaba la ausencia de un jugador propio y entusiasmaba. Sólo los más osados fanáticos, se permitían soñar con esas jornadas que quedan grabadas entre los más épicos recuerdos.
Y así fue que a los doce minutos, llegó la heroica. La jugada de oro. Norberto Palmieri, abrió a la derecha, para Luciano Arcuri, quien tiró el centro perfecto. Y apareció, ganándole a todos los defensores, el Tren del Oeste, Franco Pulicastro, para empujar esa pelota al fondo del arco y decretar el tercero del Albirrojo. Explotó por completo el Pablo Comelli, para expresar un grito de desahogo. Su conjunto, lo dio vuelta jugando con uno menos, y el tanteador estaba 3 – 2 en favor de los conducidos por Norberto D’Angelo.
Tremendo golpe para el Cartero, que no alcanzó a dar acuse de recibo inmediato.
A los diecinueve minutos, reaccionó con más empuje que fútbol Comunicaciones. René Lima, habilitó a Gonzalo Vivas, quien no llegó a rematar. Entonces, le cayó la pelota a Nahuel Cáceres, que pudo conectar su disparo y en la línea magistralmente, Nicolás Malvacio la desvío al tiro de esquina, con un cabezazo atajador.
Un minuto después, en un acto defensivo, a la salida de un tiro de esquina, Franco Pulicastro fue a marcar a Emiliano Trovento, contra el lateral derecho, en sector defensivo. Y ganó con vehemencia, la bola. Con tanto ímpetu, que el delantero además de adueñarse de la dividida, se recuperó y salió eyectado como un relámpago con la pelota en sus pies, en dirección al arco. Con tanta ductilidad, que tuvo la generosidad de habilitar a su compañero de ataque, Lucas Farías, para que corone con el cuarto tanto. Pero en el momento de la puntada final del delantero, se interpuso Gonzalo Vivas con las manos extendidas, para desviar el sutil remate con los brazos. ¡Era penal! Inexplicablemente, Gonzalo Pereira no vio la mano -o no quiso cobrarla-, y le dio continuidad al juego.
Los minutos trascurrían, y el trámite se hacía eterno para los de Rojo y Blanco. Para colmo, deliberadamente, el segundo asistente, Héctor Gómez Bracho, se empeñó en levantar la bandera, para cobrar un par de posiciones adelantadas inexistentes, cuando el Albirrojo sumaba méritos y situaciones, para ampliar la cuenta.
Con solidaridad, sacrificio y una fibra no vista hasta aquí en la temporada, jugadores como Fernando Enrique y Franco Pulicastro, se arrojaban al piso para marcar y ganar el balón. Pura actitud. Sacrificio total, para aguantar la victoria.
Sobre el final, en un partido muy caliente y peleado en los bancos de suplentes, a los cuarenta y cuatro, Jorge Ferrero tiró un centro muy complicado al corazón del área Albirroja. Allí, controló bien Nahuel Cáceres. El atacante, que había arrancado como titular en el Cartero, llegó a puntearla hacia el palo derecho de Mauro Casoli. Por esas cosas del destino, la pelota pasó muy cerca, pero desviada. Sufría todo Talleres los minutos finales.
En la última del pleito, para que sea aún más épica la historia, a los cuarenta y ocho minutos, cuando se estaba por terminar el encuentro, un parante divino salvó a Talleres. Guido Dal Casón, controló en la puerta del área y luego de un rebote, levantó el centro, que encontró la cabeza de Sebastián Matos. El goleador Cartero, le ganó en las alturas a Marco Lambert y la pelota, pegó en el travesaño. Aunque el susto, no pasó. Tras el rebote, en el área chica, Guido Dal Casón proyectó un cabezazo a quema ropa, que topó con una monumental respuesta de Mauro Casoli, para sostener el triunfo, en un día que quedara para el recuerdo en todos los hinchas Albirrojos.
Talleres logró remontar un partido, con dos goles abajo y un hombre de menos, y el final entregó una explosión de éxtasis en Remedios de Escalada, luego de haber derrotado a uno de los grandes valores de la Temporada, en la Primera B.
Con tres puntos que tienen una plusvalía, el Tallarín regresó a la punta del Clausura, que momentáneamente había dejado, luego del triunfo de Acassuso ante Argentino de Quilmes, el Viernes. Este resultado además de permitirle continuar en lo más alto, en compañía de Ituzaingó, UAI Urquiza y Defensores Unidos, le permite llegar entonado al clásico frente a Los Andes, que tendrá que disputar con esta misma actitud, en Lomas de Zamora, en un duelo por el honor de barrios.
SISTESIS:
TALLERES 3
Mauro Casoli; Luciano Arcuri, Nicolás Monserrat, Cristián Godoy, Nicolás Malvacio y Ariel Barreiro; Norberto Palmieri y Patricio Romero (76’ Marco Lambert); Fernando Enrique (91’ Alejandro Aranda); Lucas Farías (82’ Luis Monge) y Franco Pulicastro.
Suplentes: Agustín Mengua, Diogo Guzmán, Ángel Gómez y Matías Bolaña.
DT: Norberto D’Angelo.
COMUNICACIONES 2
Julián Kadijevic; Lucas Banegas, Maximiliano García (84’ Guido Dal Casón) y Mariano Pieres; Gonzalo Vivas, René Lima (84’ Tobías Bovone) y Enzo Ybáñez (60’ Facundo Barboza); Jorge Ferrero, Alexis Vázquez y Emiliano Trovento (69’ Sebastián Matos); Nahuel Cacéres.
Suplentes: Estéfano Francesconi, Jonathan Chacón y Mauro Miraglia.
DT: Germán Cavalieri.
Goles: 16’ Emiliano Trovento y 36’ Lucas Banegas (C); 38’ y 57’ Franco Pulicastro y 43’ Lucas Farías (T).
Amonestados: Nicolás Malvacio y Mauro Casoli (T); Emiliano Trovento y Lucas Banegas (C).
Expulsado: 35’ Ariel Barreiro (T).
Incidencia: Mauro Casoli (T) le contuvo un penal a Lucas Benegas (C).
Estadio: Talleres (Regular).
Árbitro: Gonzalo Pereira (Muy Mal).
Asistentes: Diego Romero y Héctor Bracho Gómez.
Cuarto Árbitro: Lucas Ozuna.
Recaudación: No fue suministrada.
Público: 2.500 personas aproximadamente.
Foto Mono Gómez. El equipo, mostró mucha actitud y personalidad, en la adversidad.
Foto Mono Gómez. Norberto Palmieri, Mauro Casoli y Nicolás Malvacio, en la formación inicial.
Foto Mono Gómez. Fernando Enrique lucha por recuperar la pelota, ante Nahuel Cáceres.
Foto Mono Gómez. Franco Pulicastro, salta en la altura en la disputa con Julián Kadijevic.
Foto Mono Gómez. Franco Pulicastro grita con el corazón y el alma, el gol del descuento.
Foto Mono Gómez. Franco Pulicastro, celebra su segundo gol, para el triunfo 3 - 2.