Talleres empató 1 – 1 ante Patronato, en el Estadio Presbítero Bartolomé Grella, en Paraná, en un duelo en el que abrió la cuenta muy temprano, con un gol de Nicolás Molina, a los seis minutos, aprovechando un error del Arquero Juan Salvá, pero el local logró la igualdad con un potente remate de Ezequiel González, a los veinticinco de ese capítulo inicial, en la tarde del Sábado, por la 13º fecha de la Zona A del Torneo de la Primera Nacional 2024. El Albirrojo, logró ponerse en ventaja muy rápido; pero el Patrón controló la pelota, y logró el empate promediando la primera mitad, en un encuentro muy discreto. Al Tallarín, le costó mucho generar situaciones durante la primera parte, y las más interesantes del complemento, las generó en los últimos quince minutos del enfrentamiento, cuando realizó el mayor despliegue físico. El conjunto entrerriano, fue levemente superior solo en algunos pasajes, aunque mostró un nivel flojo, en relación a la jerarquía con la que cuenta en su plantel. A todo esto, el Marcador Central Nicolás Monserrat, debió dejar el equipo en diecinueve minutos del primer tiempo, por una fuerte dolencia muscular, que lo margina de los próximos partidos. Sumó un punto, en su gira fuera de Remedios de Escalada, en la condición que más cómodo le siente, ante otro rival directo, que tampoco logra despegarse del fondo de la Tabla, en esta zona.

Foto Prensa Talleres. Nicolás Molina, festeja la apertura del marcador, tempranamente.

Talleres se trajo una unidad de su visita a Paraná, y volvió a sumar. Siempre es importante rescatar puntos, cuando el enfrentamiento implica el recorrido de centenares de kilómetros. Además, la igualad en el resultado y el reparto de unidades ante un rival directo, en condición de visitante, se percibe como mayor negocio para los forasteros, en este largo Torneo de la Primera Nacional. Más aún, si se tiene en cuenta que el rival de turno, viene de disputar la Copa Libertadores, el año anterior; y hace menos de un año y medio, disputaba la Liga Profesional. Talleres igualó 1 – 1 frente a Patronato, en un partido en el que logró la ventaja en el amanecer de la jornada, aunque no pudo sostener el resultado para quedarse con la victoria.

En el inicio del pleito, no había mucho entusiasmo por parte del público local, en lo que refiere al clima del encuentro. No se escuchan cánticos, ni se registraban señales de aliento. El viento, se apoderaba del protagonismo escenario, en la tarde de Paraná, en el Estadio Presbítero Bartolomé Grella.  

Los dos equipos, trataron de acomodarse en esos primeros minutos. De acuerdo a la estrategia prevista, Talleres se ordenaba tácticamente con cuatro defensores y cuatro mediocampistas más definidos, con un sistema que buscaba ofrecer otro funcionamiento, a raíz de la ausencia del Capitán Fernando Enrique, por un desgarro. Sin embargo, el que madrugó, fue la visita. A partir de un balón detenido, y mala respuesta del local.

A los seis minutos de la etapa inicial, Talleres tuvo un tiro libre desde el sector derecho. Alejandro Benítez, se hizo cargo de la ejecución. Con viento en contra, lanzó un bochazo al área, que intentó controlar abajo, el Arquero Juan Salvá. Pero, rebotó en su cuerpo y quedó sin cobertura. Allí, apareció Nicolás Molina, en el cuadro menor, para empujarla al fondo de lad e red. Talleres ganaba 0 – 1, y los locales no podían comprenderlo.

Patronato, estando en desventaja en el marcador, se adueñó del manejo del balón. Intentaba, jugar rápido en la mitad del terreno, en un campo que estaba blando y ligero. El Tallarín, advertía que en el fondo aparecían los errores del rival y segmentos mal cubiertos. Por ello, retrocedían sus líneas, apostando a un contra veloz de sus atacantes.

Sobre los dieciocho minutos, el Rojo y Negro, tuvo un tiro libre, recto al arco. Desde más de cuarenta metros, le pegó directo al arco Arnaldo González, y el Arquero Damián Tello desvió con sus manos, por encima del parante superior.

Luego de esa acción, Nicolás Monserrat debió dejar el campo de juego, por una fuerte dolencia muscular, en su pierna izquierda, producto de un desgarro en el isquiotibial. David Acucharro, ingresó en su reemplazo, para cubrir la posición de segundo marcador central.

El Patrón, administraba el manejo de la pelota. En una salida rápida, compuso la jugada que le dio el empate. Tras un centro de Patricio Romero, Diego Martínez, bajó la bola con el pecho, para su Arquero. Juan Salvá, rosando el borde del área, metió un misil profundo. Franco Coronel, picó y ganó a espaldas de Fernando Duré y David Achucarro. Éste mismo, tocó hacia adentro del área, y Frabricio Sanguinetti, que no logró controla. Fuera de esa mismo área, apareció Emiliano Purita, quien remató arco. Pero el esférico, rebotó en Patricio Romero y le quedó a Ezequiel González que desde afuera, la acomodó e incrustó contra el palo derecho de Damián Tello. El marcador estaba 1 – 1, y los de Paraná sentían alivio.

El Albirrojo, no encontraba asociar juego con fluidez. Sus delanteros, no lograban gravitar en profundidad en ataque. Intentaba mantener un equilibrio y bajar el ritmo, con el que se daba el trámite, en el último cuarto de la etapa inicial.

En cuarenta y un minutos, el local tuvo el segundo. Diego Martínez, lanzó un lateral a modo de centro desde la izquierda, que Ezequiel González peinó cerca del cuatro menor, y volvió a cabecear Emiliano Purita en la puerta del área chica; la bocha, se estrelló contra el palo izquierdo de Damián Tello. Tras el rebote, Alejandro Benítez despejó con firmeza, y apagó el incendio.

El final de la primera parte llegó, con un Talleres que mostraba poca potencia en ofensiva, un una partido de intensidad media.

En los primeros pasajes de la complementaria, el que mostró mayor determinación para ir por la victoria, fue el elenco de Walter Perazzo.

Por eso, a los dos minutos, Franco Coronel disparó desde afuera del área, un tiro potente que picó en el camino. Damián Tello, logró desviar contra la base de su palo derecho, al tiro de esquina.

Los representativos del conjunto entrerriano, intentaban jugar con mayor fluidez, aunque la visita no tenía apuro para jugar.

Entendiendo que el Albirrojo, necesitaba mayor despliegue en ataque y alternativas en las construcciones ofensivas, Martín Rolón introdujo tres variantes juntas, a los catorce minutos. Agustín Campana, Rodrigo Cao y Ciro Campuzano, reemplazaron a Diogo Guzmán, Matías Donato y Nicolás Molina, respectivamente.

Walter Perazzo, tomó nota que el rival había modificado todo su frente ofensivo, y decidió meter también tres variantes juntas, a los quince minutos. Juan Barinaga, Valentín Pereyra y José Valencia, sustituyeron a Franco Coronel, Fabricio Sanguinetti y Emiliano Purita, correlativamente, para oxigenar también sus fuerzas de ataque.

El cronómetro marcaba los dieciocho minutos, cuando los de Paraná, generaron una muy nítida, con la movilidad por derecha de Valentín Pereyra, y un centro preciso que arrojó para el cabezazo de Martín Ferreyra. La mano salvadora de Damián Tello, apareció para despejar por encima del travesaño, otra atajada enorme.

Hubo un quiebre en el curso de las acciones, para el último cuarto del duelo. Patonato, no pudo sostener la intensidad en sus manifestaciones en el campo enemigo. En cambio, Talleres empezó a sorprenderlo. Con la movilidad de los tres jugadores que habían llegado como recambio, y el soporte de Tomás Asprea, en la administración, la visita se soltó más.

En treinta y un minutos, Agustín Campana probó al arco, desde el vértice derecho, pero Julio Salvá respondió con solvencia.

Dos minutos más tarde, Alejandro Benítez presionó sobre la salida de Juan Barinaga; ganó la bocha y tocó con Ciro Campuzano, quien puso un pase en cortada y profundo, para que resuelva Rodrigo Cao. El Delantero, prefirió acomodar la pelota, sacarse la marca de encima de Martín Ferreira girando, y definió por arriba. El balón, fue interceptado por el pie de ese mismo Marcador Central, y culminó en un tiro de esquina.

Para el tramo final, el Cuerpo Técnico local determinó una variante, y retiró del campo a Ezequiel González, el autor del gol y apostó por un hombre más de ataque, como Sebastián Malimberni.

En cuarenta minutos, Martín Rolón resolvió la última variante. Sebastián Benega, reemplazó a Tomás Asprea, para tener un Mediocampista con ida y vuelta. Había espacios. Talleres, quería aprovecharlos para buscar el triunfo. El dueño de casa, estaba mal parado y muy expuesto defensivamente.

Inmediatamente, cuando Patronato atacaba, Nicolás Malvacio le ganó la disputa de la pelota, y se proyectó a toda marcha en ataque. En una salida veloz de contra, habilitó a Ciro Campuzano, que asomó por la derecha. Éste, jugó la individual. Dominó hasta encontrar el mejor perfil posible, y envió un tiro al arco, que terminó en las manos de Julio Salvá.

Tras esa acción, Walter Perazzo concretó el último cambio, y Emanuel Maciel ingresó por Arnaldo González, para no arriesgar más de la cuenta.

La última, en un módulo de cinco minutos adicionados, que el Árbitro Lucas Cavallero agregó, en su trabajo de perfil localista, la tuvieron los de Escalada. Ciro Campuzano, recuperó por la derecha y conectó inteligentemente con Rodrigo Cao, quien de espaldas al arco, lo vio picar por un costado a Agustín Campana. Soltó, para que el Mediocampista avance con luz verde. Agustín Campana, trazó una diagonal hacia el centro, y remató desde más de veinticinco metros. Pero su lanzamiento, salió apenas desviado.

Así, con una mejor imagen de Talleres, terminó el partido, en Paraná. Y el Albirrojo, se trajo un punto valioso, de su paso por el Litoral argentino.  

El equipo de Martín Rolón, en un duelo individual ante Patronato, que se aloja entre los del fondo de la Tabla en la Zona A, consiguió su objetivo de no cederle tres unidades al rival, que tal vez puedan ser determinante en una instancia de cierre de la Temporada.

Como contra punto, se lamentó por no haber podido sostener un resultado que administraba a su favor, desde el comienzo. Y tendrá que seguir trabajando, y reconsiderar algunos aspectos en su funcionamiento ofensivo. Generó poco en la primera parte; más allá del desgaste para recuperar y obturar en la salida del oponente, muestra una anemia de situaciones y acciones decisivas, en los últimos metros de la cancha, que no le permiten ganar encuentros, en duelos que muchas veces son parejos, y se resuelven por la fineza en la resolución.

Ahora, más aliviado, podrá ponerse a trabajar de lleno y planificar el partido ante el Racing Club de Avellaneda, que lo espera el Jueves, por los 16º de Final de Copa Argentina. De todos modos, no debe descuidar su objetivo en la Primera Nacional.

SISTESIS:

PATRONATA (PARANÁ) 1

Julio Salvá; Gonzalo Asís, Mateo Burdisso, Martín Ferreyra y Diego Martínez; Emiliano Purita (60’ José Valencia), Gustavo Turraca y Ezequiel González (82’ Sebastián Malinberni); Arnaldo González (87’ Emanuel Maciel), Franco Coronel  (60’ Juan Barinaga) y Fabricio Sanguinetti (60’ Valentín Pereyra).

Suplentes: Iván Cháves, Facundo Díaz, Juan Perotti y Augusto Picco.

DT: Walter Perazzo.

TALLERES 1

Damián Tello; Fernando Duré, Nicolás Monserrat (19’ David Achucarro), Nicolás Malvacio y Patricio Romero; Diogo Guzmán (59’ Agustín Campana), Norberto Palmieri, Alejandro Benítez y Tomás Asprea (85’ Sebastián Benega); Matías Donato (59’ Rodrigo Cao) y Nicolás Molina (59’ Ciro Campuzano).

Suplentes: Mauro Casoli, Federico Ulayar, Maximiliano Rogoski y Franco Zicarelli.

DT: Martín Rolón.

Goles: 6’ Nicolás Molina (T) y 25’ Ezequiel González (P).

Amonestados: Diogo Guzmán, Norberto Palmieri y Fernando Duré (T).

Estadio: Patronato (Buena).

Árbitro: Lucas Cavallero (Regular).

Asistentes: Pascual Fernández y Javier Mihura.

Cuarto Árbitro: Guillermo González.

Recaudación: No fue suministrada.

Público: 3000 personas aproximadamente.