¡Se consagró Ganador del Clausura! Talleres goleó 3 – 0 a Ituzaingó, con goles en de Lautaro Villegas y Fernando Enrique, a los veinticuatro y treinta y cinco del primer tiempo, respectivamente; y Ciro Campuzano, a los cuarenta y tres, sobre el final del partido, en el Estadio Pablo Comelli, por la 15° y antepenúltima fecha de este Torneo Clausura, y se quedó anticipadamente con el título de Ganador del certamen, en un mediodía inolvidable en Remedios de Escalada. La fiesta fue completa, para el delirio en el Templo. El Tallarín, necesitaba un triunfo para asegurarse la obtención del título, cuando todavía restan dos fechas más por jugarse, y lo logró superando ampliamente a un rival, que sufrió la expulsión de Fernando Gutiérrez a los treinta y siete del complemento y quedó pendiendo de un hilo en la Categoría. Práctica, contundente y eficaz, la Roloneta arrolló a otro rival más y alcanzó su sexta victoria en cadena. Con números asombrosos para la historia de Talleres en el fútbol profesional, ganó un Torneo comandando la Tabla de principio a fin. Compacto; firme; solidario; y preciso, este conjunto se quedó con un premio muy justo para lo que fue semejante campaña. Le sacó ocho puntos a su escolta San Miguel, y once a Argentino de Quilmes -que debe jugar este Domingo-, en una cuenta que es irreversible; y por eso, festejó el título. La conquista del Clausura, le permitió acceder a jugar las Finales frente al Trueno Verde, que fue el Ganador del Apertura, para dirimir el ascenso directo. En lo inmediato, cuando el elenco de Martín Rolón tiene seis puntos por jugar y el de Gustavo Coleoni tres, la pelea está dada por ver quién se queda con el primer lugar en la General; Talleres sumó ya 56 puntos, y San Miguel manda aún con 57 unidades; y el primero de esta Tabla será local en el segundo partido. Talleres va por más.
Foto Mono Gómez. Los festejos se desataron, para celebrar la conquista del Clausura.
¡Ganó el Clausura! ¡Tallere jugará la Final ante San Miguel, por el Ascenso! El equipo de Martín Rolón, lo logró. Se coronó con la obtención del Torneo Clausura, aun cuando testan dos fechas por disputarse. Brillante segunda parte de la “Roloneta”, que se adjudicó el certamen de punta a punta. Los números y las estadísticas, son inmejorables. Fue líder, desde la primera fecha y hasta el final, sin bajar jamás de la cima. Se quedó con una merecida recompensa, a su trabajo arrollador, tras haber consolidado once victorias en catorce presentaciones que lleva efectuadas. Y en el mediodía del Sábado, cuando se le presentó la primera oportunidad desde lo matemático, para definir el Torneo sin depender de otros resultados o combinaciones, tuvo la audacia e inteligencia necesaria, para resolver el encuentro. Goleó 3 – 0 a Ituzaingó en el Estadio Pablo Comelli, junto a su gente, que deliró con este título que esperaba hace más de veintiocho años. Supo aprovechar las debilidades de un rival, que pelea por la permanencia y que quedó con la soga en el cuello respecto a su participación en la Primera B 2024.
La fiesta fue completa. Tuvo todo lo necesario, para que sea una jornada de gloria, que quedará en el libro de las páginas coloridas de la historia de Talleres. Un marco conmovedor; una salida con humo colorido; una victoria con varios goles, en el arranque y final de partido; y festejos con la dosis de mesura necesaria, sabiendo que la conquista del Clausura, es la llave para jugar la Final por el único ascenso directo, ante el Trueno Verde, donde verdaderamente se resuelve lo importante.
De arranque, la premisa del dueño de casa, en la planificación previa, era someter al oponente. Dominar territorialmente, y dar el golpe en el momento oportuno. En un contexto con mucha ansiedad, no salió desesperado, a quemar aquella estrategia que lo trajo hasta aquí. El público, empujaba desde los cuatro costados del Pablo Comelli. Sin embargo, dentro del campo, se puso el overol para hacer funcionar la Máquina del Sur, y comenzó a trabajar para ganar el pleito.
A los nueve minutos, Norberto Palmieri envió un centro desde el sector derecho, en el confín de la cancha, que Lautaro Villegas cabeceó exigido y finalmente Rodrigo Cao, lanzó al arco, pero el remate se fue desviado.
Dos minutos después, Alejandro Benítez rechazó larga una pelota en la mitad de la cancha, y Agustín Campana, recogió sobre la derecha. El Mediocampista, se pronunció hacia el área y remató muy fuerte, por encima del travesaño.
En trece minutos, Ituzaingó llegó por primera vez. Tuvo un tiro de esquina desde la izquierda de su ofensiva. Fernando Gutiérrez, envió un disparo directo al arco, que Damián Tello despejó al tiro de esquina, con un manotazo salvador.
El Verde, batallaba el juego a esa altura, en la mitad del terreno. El ritmo, no era fluido en la circulación del balón. Esto, beneficiaba a la visita, que con el correr de los minutos iba mostrado que su plan. Quería mantener lo más lejos posible al rival, del arco defendido por Tomás Figueroa.
Todo fue mágico, atravesándola barrera de los veinticuatro minutos, cuando Talleres abrió el marcador y se empezó a quedar, con lo que tanto buscaba. Se gestó, sobre la derecha. En un circuito de pases bien elaborado, la pelota llegó desde el círculo central, a través de los pies de Alejandro Benítez, con un lanzamiento para Fernando Duré. El Defensor Albirrojo, especuló en el mano a mano frente a la marca de Enzo Ibáñez, y envió un centro a la altura del punto del penal. En una acción de las que se ensayan en la semana, Fernando Enrique fue a buscar y sorprendió con un cabezazo. El Arquero Tomás Figueroa, dio respuesta con su mano derecha. Sin embargo, Lautaro Villegas estaba esperando a la altura del cuadro menor, y mandó la pelota al fondo de la red. El Goleador de Neuquén, se trepó del alambrado para celebrar junto a su gente y desatar la locura colectiva, porque el Albirrojo ganaba 1 – 0 y quedaba cerca del objetivo.
Martín Rolón, no se conformó con la ventaja mínima. Le pidió a sus hombres, que fuesen por más. Mostraba superioridad en los quites y salidas. Tiene cada vez más aceitados lo movimientos, en la embestida ofensiva.
Sobre veintiocho, Patricio Romero profundizó una crecida por la izquierda y eyectó un centro, que Agustín Campana definió por el segundo palo. Pero su toque, salió apenas desviado sobre el palo izquierdo de Tomás Figueroa.
El León, no se resignaba, pese a que la parada era brava. Intentó en treinta y cuatro, con un centro de Diego Serrano y un cabezazo de Alcides Miranda Moreira, que contuvo Damián Tello, sin problemas.
El cronómetro marcaba los treinta y cinco minutos, cuando el local, amplió la cuenta. Con una fórmula similar a la que se empleó para fabricar el primero, Norberto Palmieri envió un bochazo, desde el círculo central, hacia la profundidad del carril derecho. Allí, recibió Agustín Campana y descargó para Lautaro Villegas, quien pasó por la derecha, como un extremo. Invirtiendo la fórmula, con un solo toque, el goleador asistió a Fernando Enrique, para que el generador del juego, esta vez defina con un sutil toque contra el palo derecho de Arquero, y celebre. Talleres ganaba 2 – 0 y había liberación en Escalada, porque estaba logrando aquello que pretendía.
Ituzaingó, sintió el impacto de la amplia diferencia, que lo complicaba demasiado, en su lucha por no descender. El curso del balón, perdió intensidad, en ese último tramo del primer tiempo.
Pese a ello, sobre el final de la primera parte, en cuarenta y tres, en una jugada de tiro de esquina preparada, desde la derecha, Agustín Campana le cedió el balón a Alejandro Benítez. Éste tocó hacia el área con Patricio Romero y finalmente, Agustín Campana fue a buscar ese descargo, y ejecutó un disparo a quemarropa que Tomás Figueroa, rechazó con sus manos extraordinariamente.
El inicio del complemento, proponía un escenario de altísima exigencia para el rival, por la supervivencia en la Categoría. Tenía que ir en búsqueda de una remontada, estando dos goles abajo.
No obstante, en esos primeros minutos del segundo tiempo, el dueño de la fiesta, le bajó la presión e intensidad a la disputa. El Entrenador Martín Rolón, metió dos cambios, a los ocho minutos, para preservar a dos jugadores claves como Fernando Enrique y Agustín Campana, que cedieron sus lugares e infresaron Franco Zicarelli y Luciano Arcuri, respectivamente.
De todos modos, a los doce minutos, como si fuese un enlace tradicional, Alejandro Benítez conectó un pase, en el carril principal, para Lautaro Villegas, quien disparó desde la altura del área grande. Pero Tomás Figueroa, rechazó con una pierna. Aunque el efecto de la pelota, la llevó a rebotar en el travesaño. El Atacante, se lamentó por no haber podido convertir el tercero.
Pasado el cuarto de hora, el Verde generó una de las pocas inquietantes, en diecisiete minutos. Fernando Gutiérrez lanzó un tiro libre frontal al área, y Alcides Miranda Moreira cabeceó de lleno hacia abajo, en un gesto técnico perfecto. Pero la mejor versión de Damián Tello apareció otra vez en acción, para desviar a milímetros de la línea de sentencia y despejar al tiro de esquina, en una de las atajadas más espectaculares de la Temporada. De esas intervenciones, esenciales para ganar un campeonato.
Ya en veintidós minutos, Alejandro Benítez disparó un tiro libre desde la esquina izquierda del ataque, y Tomás Figueroa despejó otra vez con sus manos, para salvar el arco de una goleada.
El encuentro, estaba definido. El Cuerpo Técnico local, prefirió cuidar a parte de su recurso humano. Por eso, a los veintisiete minutos, Ariel Barreiro y Ciro Campuzano, ingresaron por Patricio Romero -arrastraba una molestia en el gemelo derecho- y Alejandro Benítez, respectivamente. Los cambios, intentaban darle en el tramo final, más explosión al ataque para aumentar la cuenta de goles a favor, pensando en la diferencia que necesita, en la Tabla General.
En ese sentido, a los treinta y cinco, en un contragolpe voraz, Lautaro Villegas enarboló una corrida por la derecha, que nació detrás de la mitad de la cancha. Y a la altura del área grande, cedió hacia su diestra, para Ciro Campuzano, que venía acompañando. El Extremo, que jugó en el León durante el Apertura, terminó rematando al arco, pero la bola se perdió contra la parte externa de la red.
Como acto reflejo, dos minutos más tarde, con pura impotencia, Fernando Gutiérrez se fue expulsado por una falta a Rodrigo Cao, con quien disputó la pelota con el brazo extendido y mucha vehemencia, sobre la zona defensiva izquierda del local. La visita, se quedó con diez.
Quedaba pocos minutos, e Ituzaingó no tenía recursos, para descontar. Se reflejaba en cancha, su pobreza futbolística. Último, con una anemia de goles alarmante, en un torneo en el que solo ha anotado dos tantos.
Mientras, Diego Guzmán reemplazó a Rodirgo Cao, en cuarenta minutos. E líder del certamen, quería asegurar el triunfo.
Para sentencias la historia, dice el viejo proverbio del fútbol, que no hay peor cuña, que la del mismo palo. Tras una mala salida de Tomás Figueroa, Luciano Arcuri recuperó en tres cuarto de cancha, combinó con Ariel Barreiro y nuevamente “el Lucho del Barrio”, limpió hacia el carril central, para que resalte el protagonista Lautaro Villegas. El inspirado goleador, puso un pase preciso en cortada para Ciro Campuzano, quien apareció fantasmalmente en diagonal, encaró al Arquero y definió abajo, transformando el resultado en goleada. Ciro Campuzano, se sacó la camiseta para celebrar, en sintonía con la multitud Albirroja, que pudo liberar un grito que tenía atragantado, a la espera del festejo anhelado. El marcador estaba 3 – 0 en cuarenta y cuatro ya, y el título garantizado.
El silbatazo final de Javier Delbarba, sonó estridentemente, en Remedios de Escalada. Los festejos se desencadenaron, en un acto de divina justicia. Abrazo; sonrisas; llantos y un manojo de recuerdos imborrables, se sucedieron en el final de esta parte clave de una película, que tiene varias secuencias más para concluir.
La Roloneta, está versión moderna de la Máquina del Sur, se adjudicó el Torneo Clausura, mostrando una altísima productividad. Logró sumar 34 puntos hasta aquí, es decir, el ochenta y tres porciento de los disputados, en catorce partidos. Acaba de sumar su sexta victoria al hilo, en este segmento determinante. Además, ganó once veces en la segunda parte, y sólo perdió un partido. Tiene la valla menos vencida, con solo cuatro goles recibidos en tres pleitos; y acumula un invicto en su arco de cuatrocientos cuarenta y dos minutos. Ganó en seis ocasiones como visitante, y perdió solo una vez fuera de Escalada. No obstante, tiene por delante dos partidos más, en los que deberá fijarse como objetivo, ganarlos, para quitarle sin especular con otro resultado, el primer puesto a San Miguel, en la Tabla General, que un lidera con 57 unidades, aunque Talleres arremete desde atrás con 56 puntos, con un partido menos.
Claro que, la obtención de este título, cobrara mayor relevancia, en la medida que este conjunto, pueda revalidar todo lo hecho hasta aquí, en la próximas Finales que le esperan ante San Miguel. Esa, es la gran batalla final. Ahí, están enfocados ahora los cañones de esta Máquina, que le ha dado una verdadera ilusión sustentable, al pueblo Albirrojo. Ese mismo, que pretenden volver a recorrer la Argentina, a través del representativo de la ciudad de Remedios de Escalada.
SINTESIS:
TALLERES 3
Damián Tello; Fernando Duré, Nicolás Monserrat y Nicolás Malvacio; Agustín Campana (53' Luciano Arcuri), Norberto Palmieri, Alejandro Benítez (72' Ciro Campuzano) y Patricio Romero (72' Ariel Barreiro); Fernando Enrique (53' Franco Zicarelli); Lautaro Villegas y Rodrigo Cao (85' Diogo Guzmán).
Suplentes: Mauro Casoli y Dylan Vergara.
DT: Martín Rolón.
ITUZAINGÓ 0
Tomás Figueroa; Diego Serrano (77' Juan Iglesias), Luciano Nebot, Alejo Politano y Felipe Nigro (58' Segundo Gras); Fernando Gutiérrez, Alan Sotelo (77' Franco Luppino), Rodrigo Soria y Enzo Ibáñez (68' Lucas Mhamed); Lautaro Mena (77' Santiago Piersigilli) y Alcides Miranda Moreira.
Suplentes: Matías Lescano y Ramiro Taborda.
DT: Fabián Mansilla.
Goles: 24’ Lautaro Villegas, 35’ Fernando Enrique y 88’ Ciro Campuzano (T).
Amonestados: Patricio Romero, Norberto Palmieri, Luciano Arcuri y Ciro Campuzano (T).
Expulsado: 82’ Fernando Gutiérrez (I).
Estadio: Talleres (Regular).
Árbitro: Javier Delbarba (Regular).
Asistentes: Arnaldo Melgarejo y Diego Amarilla.
Cuarto Árbitro: Diego Torres.
Recaudación: $ 3.996.800.
Público: 10.000 personas aproximadamente.
Foto Mono Gómez. Talleres fue un justo Ganador del Clausura, de principio a fin.
Foto Mono Gómez. Lautaro Villegas, se trepó al alambrado, para celebrar el primer gol.
Foto Mono Gómez. Fernando Enrique, anotó el segundo tanto, y lo festejó con mucha felicidad.
Foto Mono Gómez. Ciro Campuzano, hizo el tercero, se sacó la camiseta, y posa con sus compañeros.
Foto Mono Gómez. Martín Rolón y Roloneta: una versión moderna, de la Máquina del Sur.